Dios de misericordia y de amor., ponemos en tus manos amorosas a nuestro hermano Martin. En esta vida tu le demostraste tu gran amor; y ahora que ya esta libre de toda preocupación, concédele la felicidad y la paz eterna. Su vida terrenal ha terminado ya, recíbelo ahora en el paraíso, en donde ya no habrá dolores, ni lagrimas sino únicamente paz y alegría con Jesús tu hijo y con el espíritu santa para siempre. Amen