Sagrado Corazón de Jesús, por la intercesión de la Siempre Virgen Santísima, Santa María de Guadalupe, tú dulce y Santa Madre y Madre y Reina Nuestra, de Señor San José, de San Miguel Arcángel, San Juan Pablo II, del Padre Carlos Eufemio Ortiz Montes, del Padre Mario Rojas Sánchez, del Padre Otto Francisco Galicia, de San Josemaria Escriva de Balaguer, del Santo Padre Pío de Pietrelcina, de San Joselito Sánchez del Río, de San Anacleto González, de Santa Teresita de Lesiux, de la Santa Madre Teresa de Calcuta, de Santa Teresa de Ávila, de mi abuelita Licha, de San Agustin de Hipona, de Santo Tomas de Aquino, de San Rafael Guízar y Valencia, de Santa María Goretti, de Don Manuel Gómez Morin, de San Francisco de Asís, de toda la corte celestial y de las benditas ánimas del purgatorio, te imploro me concedas rentar mi departamento lo antes posible. Gracias por escuchar mi oración y mis plegarias. Sagrado Corazón de Jesús manso y humilde haz nuestros corazones semejantes al tuyo y libéranos del yugo de nuestros enemigos. Amén. Dios te Salve oh José, esposo de María, lleno de gracia, Jesús y su Mami Santísima están contigo, bendito eres entre todos los hombres y bendito es Jesús el hijo de Mamá María. San José, Padre Terrenal y Virginal de Nuestro Señor Jesucristo Misericordioso, ruega por nosotros los pecadores, ahora y en la hora de nuestra muerte. Amén. San José, terror de los demonios, guía a nuestras familias, para que en ellas siempre haya amor, unidad, salud, prosperidad, paz, perseverancia, paciencia, armonía y alegría. Aleja de nosotros todo lo que pueda causarnos daño; y guárdanos en el Sagrado Corazón de Jesús, para que cada día transcurra como en la casa y en el taller de Nazaret. Amén. San Miguel Arcángel, defiéndenos en la lucha, se nuestro amparo en contra de la perversidad y acechanzas del enemigo , que Dios lo reprima, es nuestra humilde súplica; y tú Príncipe de la Milicia Celestial, con el poder, la gracia y la autoridad que Dios te ha concedido, arroja al infierno a satanas y a todos los espíritus malignos que vagan por el mundo para la perdición de las almas. Amén. Nuestra Señora de la Paz, por favor te lo imploro, ruega e intercede por nosotros. Amén. Sagrado Corazón de Jesús hazme un instrumento de tu paz; dónde haya odio, ponga yo amor; dónde haya injuria, ponga yo perdón; dónde haya duda, ponga yo fe; dónde haya desaliento, ponga yo esperanza; dónde haya error, engaño y mentira, ponga yo la verdad de Jesucristo. Sagrado Corazón de Jesús de Jesús, que no busque yo tanto ser amado, como yo amar; que no busque yo tanto ser comprendido, como yo comprender; por qué dando es como recibimos; amando es como somos amados; comprendiendo, es como somos comprendidos; perdonando es como somos perdonados; y muriendo a nosotros, es como nacemos a la vida eterna. Amén.